Paro de colectivos: sorpresiva medida de fuerza de choferes del Grupo DOTA por falta de pago de salarios
Una inesperada medida de fuerza deja sin transporte a miles de pasajeros en el Área Metropolitana de Buenos Aires. Más de 50 líneas de colectivos se encuentran afectadas por un reclamo gremial de trabajadores del Grupo DOTA, que abarca a gran parte de todo el servicio de micros de la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano. Los choferes exigen el pago de una deuda salarial.
El paro de colectivos rige desde las 0 horas de este lunes 27 de febrero y “hasta regularizar la situación”, confirmaron desde la empresa esta madrugada.
Anoche a última hora gremios del sector decidieron llevar a cabo una abstención de tareas hasta que las empresas paguen lo adeudado a los choferes. En efecto, los colectiveros se presentan en cabecera pero hasta tanto no cobren lo que desde el GRUPO DOTA les deben no prestarán el servicio. Por lo pronto la medida de fuerza afecta a más de 50 líneas de colectivos que operan en el AMBA pero podría extenderse a más de 80 si continúa sin saldarse la deuda salarial. Con la particularidad que el paro se está llevando a cabo en el día que comienzan las clases en la Ciudad de Buenos Aires.
Las líneas que están de paro hasta el momento son: 5, 6, 7, 8, 9, 20, 21, 23, 24, 25, 28, 31, 44, 50, 51, 56, 57, 74, 76, 79, 84, 91, 99, 101, 107, 108, 117, 135, 146, 150, 161, 164, 168, 177, 188, 263, 271, 299, 370, 373, 384, 385, 388, 403, 405, 421, 429, 435, 503 San Vicente, 514 Almirante Brown, 520 Lanús. Mientras que hay otras como la 100 del Grupo DOTA que funciona con menos frecuencias.
Pasadas las cinco de la mañana de este lunes comenzaron a acumularse filas de personas en Constitución que se vieron sorprendidas por la medida de fuerza que comenzó a regir desde la medianoche.
“Hay varios colectivos que no están andando; no sabía que había paro, me enteré esta mañana”, manifestó uno de los tantos usuarios que -en diálogo con Crónica– transmitió su sorpresa por la decisión gremial.
“Hay que tener mucha paciencia”, lamentó una pasajera que esperaba el colectivo para llegar a su trabajo en un inicio de semana complicado. “Voy a esperar y sino tomaré otro”, agregó un usuario que se encontraba esperando en Constitución, quien a la vez reconoció que el colectivo es su única opción para viajar a su trabajo ya que tomar un taxi “es muy caro”.
El Gobierno les dará $ 28.000 millones a las empresas de transporte público de pasajeros del interior del país
En medio de las habituales discusiones que se generan año tras año sobre la diferencia del precio del boleto de colectivo que rige entre el AMBA y el resto del país, el Gobierno Nacional anunció la semana pasada que le otorgará un total de $ 28.000 millones de pesos a las empresas de transporte público urbano y suburbano del interior del país en carácter de subsidios.
A través de una resolución publicada en el Boletín Oficial, el Poder Ejecutivo oficializó el pago de hasta $ 7.000 millones de pesos por mes, cifra que otorgará por los meses de enero, febrero, marzo y abril de este año. Por esto mismo, ordenó además que la Dirección Nacional de Gestión de Fondos Fiduciarios del Ministerio de Transporte realice las liquidaciones correspondientes del primer y segundo mes de 2023, puesto que son plazos vencidos o próximos a vencer. Además, pidió que se avance con las liquidaciones de los meses restantes.
La resolución llegó tan solo una semana después de que la Unión Tranviarios Automotor (UTA) convocara a un paro total de actividades en reclamo de sentarse a negociar las paritarias del 2023. Tras las amenazas, logró llegar a un acuerdo de un aumento semestral menor al 30% para los choferes.
No obstante, uno de los requisitos que solicitó el Gobierno para la entrega de los subsidios es implementar el sistema SUBE o estar próximo a hacerlo en las unidades de cada jurisdicción.
“El importe de cada cuota se determinará teniendo en cuenta el personal que corresponda a cada operadora por un lado y los kilómetros informados para cada empresa/jurisdicción por otro”, asegura el documento. De esta manera, se tendrán en cuenta también los agentes computables declarados por la empresa, además de otras variables que derivan de esos dos puntos centrales.
Para eso, la Subsecretaría de Política Económica y Financiera de Transporte solicitará a las empresas beneficiarias y/o jurisdicciones toda la información necesaria para procesar los datos.
Aquellos agentes que sean beneficiarios de este subsidio deberán suscribirse al “Convenio año 2023″, al igual que deben tener adoptado o estar próximos a implementar el servicio de SUBE, como medio de percepción de la tarifa para el acceso a la totalidad de los servicios del transporte público.
Al convenio, deberán adherir las provincias o, en su caso, municipios para poder beneficiarse de las compensaciones.