Milei reunió a los diputados que apoyaron el veto a la reforma jubilatoria y pidió mantener la unidad para defender el rumbo del Gobierno
Menos de una semana después de que Diputados respaldara el veto que frenó el aumento a las jubilaciones, el presidente Javier Milei recibió en la Quinta de Olivos a los “87 héroes” -como él mismo calificó- que votaron a favor de su decisión, y agradecerles personalmente su apoyo, en lo que fue un nuevo gesto de acercamiento a la oposición dialoguista.
Los comensales se sentaron a lo largo de una gran mesa en forma de “u”, con el jefe de Estado a la cabeza, escoltado por su secretaria general, Karina Milei; el titular de la Cámara baja, Martín Menem, y el vocero presidencial, Manuel Adorni, a su izquierda, y el jefe de Gabinete, Guillermo Francos; el asesor Santiago Caputo y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, a su derecha.
Fuentes cercanas al líder libertario precisaron que durante el encuentro el mandatario nacional brindó “una charla motivacional” a los dirigentes de los distintos partidos, para que “se sientan parte” del triunfo del oficialismo en el Congreso.
Si bien hubo algunas botellas de vino circulando, la mayoría de los presentes optaron por beber agua o gaseosa para acompañar la comida, que consistió en una entrada de achuras, con chorizo, morcilla y chinchulines, y un plato principal de asado y vacío. De postre hubo mouse de chocolate.
“Sigamos trabajando todos juntos, como lo vinimos haciendo hasta ahora. Juntos podemos hacer un scrum (formación en el rugby en el que los jugadores se juntan para disputar la pelota) par bloquear los intentos de desestabilizar la economía”, expresó el Presidente, en su breve discurso, de menos de cinco minutos.
Recién pasadas las 23:20 terminó el encuentro y los diputados comenzaron a abandonar el predio, tras haber escuchado las palabras de Milei, que les agradeció la ayuda a nivel parlamentario y les pidió continuar con la sintonía legislativa.
Milei se retiró este martes de la Casa Rosada pasadas las 15:30 para dirigirse a la Quinta de Olivos, donde a partir de las 20:00 comenzó a recibir a los legisladores, mayoritariamente del PRO, de La Libertad Avanza y del Movimiento de Integración y Desarrollo (MID), que encabeza Oscar Zago.
En el radicalismo, en tanto, continuó la división, ya que de los cinco diputados que acompañaron el veto de Milei, y que previamente se habían fotografiado con él en Balcarce 50, solamente uno de ellos asistió a la comida, el tucumano Mariano Campero.
Por su parte, Martín Arjol se ausentó para poder defenderse en la reunión del bloque que se llevó adelante esta misma noche, en la que se analizó el futuro de estos dirigentes; Luis Picat tuvo un problema familiar; Pablo Cervi prefirió no ir y el correntino José Tournier, se encontraba lejos de Buenos Aires, en Goya, su ciudad natal.
La cena se dio en el marco de las expectativas por una posible alianza entre La Libertad Avanza, el PRO y el resto de los espacios alineados con el Gobierno, de cara a las elecciones del próximo año, que podría comenzar con el trabajo coordinado a nivel parlamentario.
Las invitaciones fueron giradas por la secretaria general de la Presidencia,quien participó del asado, acompañada por su subsecretario de Gestión Institucional, Eduardo “Lule” Menem, y el titular de la Cámara baja, Martin Menem, con quienes tiene fuerte vínculo.
Por parte del Gobierno, además de Francos y Bullrich -que se incorporó en el último tiempo a la mesa política del oficialismo-, también asistió el vicejefe de Gabinete del Interior, Lisandro Catalán.
Llamó la atención la presencia del influyente asesor presidencial Santiago Caputo, no solo porque no suele aparecer en las imágenes oficiales, sino porque además se sentó al lado del jefe de Gabinete, en una muestra más de unidad entre ambos, luego de versiones de supuestas discusiones internas.
Por la mañana, Catalán publicó en las redes sociales una foto en la que también se los veía a los dos sonrientes, junto a Karina Milei, en uno de los balcones del despacho presidencial y con la frase “todos peleados”, en tono irónico.
Asimismo, encabezados por su jefe, Gabriel Bornoroni, toda la bancada de La Libertad Avanza se presentó al asado, al igual que Cristian Ritondo y gran parte del PRO, excepto Álvaro González, Ana Clara Romero, Héctor “Tito” Stefani y Héctor Baldassi, quienes no fueron invitados, ya que votaron en contra del veto.
En cuanto a los gastos que demandará este encuentro multitudinario, el vocero presidencial, Manuel Adorni, otro de los comensales de la noche, aclaró en las redes sociales que cada legislador deberá pagar su comida.
“Ante algunas versiones disparatadas sobre la cena que se realizará hoy en la Quinta de Olivos, les cuento que la misma será abonada por cada uno de los comensales. El costo será de $20.000 por persona y lo abonaremos con tarjeta de débito (no se aceptará pago en efectivo). Fin”, escribió el funcionario en su cuenta de X.
También asistieron diputados de otros partidos, como Carolina Píparo y Lorena Macyszyn -que recientemente volvieron a LLA-, Agustín Fernández, Elia Fernández, Gladys Medina y Paula Omodeo, entre otros.
Muchos de los dirigentes ingresaron a la Quinta de Olivos con ensaladas y acompañamientos varios, pero al ingresar, las autoridades del lugar les indicaron que tenían que dejar sus celulares en la entrada, para evitar que surgieran filtraciones.
“La inflación mensual anualizada pasó del 17.000% anual al 28% anual. Esto parece mostrar que no existe tal cosa como un piso mensual del 4%. Ahora vamos por más… PD: para los periodistas brutos que dicen que invento los números. La inflación anualizada de diciembre surge de hacer [(1,54)^12] – 1 y al resultado lo multiplican por 100, lo cual arroja 17.692, 98%”, tuiteó el Presidente, poco antes de ir a la cena.