Bombas, hinchas en alambrado y varias suspensiones en Colón vs. Talleres, por Copa Argentina
La parcialidad del Sabalero intentó desde un primer momento frenar el trámite del juego y lamentablemente lograron su cometido en múltiples ocasiones a lo largo del primer tiempo.
El duelo entre Colón y Talleres por los 16avos de final de la Copa Argentina se vio teñido por la polémica al ser detenido en numerosas ocasiones en el primer tiempo por incidentes provocados por la parcialidad del Sabalero, que buscaba la detención definitiva del encuentro que tiene lugar en el Coloso Marcelo Bielsa de Rosario.
Ni bien Nicolás Ramírez dio el pitazo inicial es que comenzaron los problemas en el sector del recinto ocupado por los hinchas del elenco santafesino, al lanzar bombas de estruendos. Escenario aun más peligroso al caer en el área de Guido Herrera, que tenía un ojo en el encuentro y el otro en lo que acontecía detrás suyo.
Inicialmente el partido se detuvo por primera vez a los diez minutos de la etapa inicial cuando un cuarteto de hinchas se trepó al alambrado y empezó a cantar colgado del mismo, lo que Ramírez no dejó pasa y frenó las acciones hasta que dejaran ese lugar tan peligroso.
Solo quince minutos más tarde es que el encuentro es pausado momentáneamente por segunda ocasión luego de que una bengala cayera en el área de Herrera, la cual el arquero del equipo de Barrio Jardín sacó por sus propios medios, y un nuevo “hincha” se trepara a la reja para colgar una bandera.
El último freno al partido en la primera etapa se dio pocos minutos más tarde, cuando no solo Nicolás Ramírez sino también jugadores de Colón como Alexis Sabella se acercaran para pedir calma a la tribuna del Sabalero y permitir que el juego pueda seguir desarrollándose. El árbitro, tras reunirse con los jefes del operativo policial, tomó la determinación de continuar las acciones desde el minuto 28 y resolvió agregando seis minutos a los 45 iniciales, tiempo de descuento donde la T lograría el 1-0 parcial en Rosario.